En la distancia, alucino con lo que pasa en el Estado español. La gente sólo se mueve cuando ya es demasiado tarde y les tocan el sueldo ya muy a saco. Viven perfectamente con la mierda al cuello, porque todavía pueden respirar. Sólo cuando la mierda les cubre la boca y sigue creciendo amenazando con tapar la nariz, comienzan a reaccionar. Y entonces todavía se les puede vender un tubo de buceador.
Hay un furibundo ataque contra "las autonomías". Tengo entendido que arrancar estos órganos de autogobierno fue una lucha durísima contra el centralismo instaurado por la dictadura. Ahora, los ciudadanos "demócratas" comienzan a pedir que eliminen las autonomías, por ser un "derroche" en sí mismas. Es decir, se abre la vía para volver a tener un único centro de decisión en todo el Estado (no vaya a ser que alguna comunidad nos salga respondona -estos vascos rebeldes-), que por supuesto seguirá las directrices del capitalismo internacional, eso que llaman "los mercados" y que en España tiene nombre y apellido: IBEX 35. Un golpe de Estado aplaudido por los mismos millones de borregos que votan a partidos neoliberales (PP y PSOE) y luego se quejan cuando les aplican políticas neoliberales.
Los mismos cretinos que repiten el falso mantra de que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades (son las grandes fortunas quienes funcionan inherentemente por encima de sus posibilidades y quienes conforman el principal pufo de la deuda: la deuda privada supera en mucho a la deuda del Estado, pero nos dicen que hemos de reducir el Estado para pagar la deuda y el rescate, sin vergüenza) ahora repiten como zombies babeantes el segundo capítulo de la gran falacia: nos hemos gobernado por encima de nuestras posibilidades.
Y no digo que en el sistema de autonomías no haya corrupción, algunas duplicidades y derroche; lo hay en todas partes, empezando por el sector privado, que hace del lujo y la riqueza su motor de avance. Digo que retirarlas para imponer un gobierno centralista tecnócrata cuyos intereses son los del gran capital y no los de nuestra sociedad, es IR HACIA ATRÁS... y mucho. No sólo desmontan nuestro sistema laboral, social y sanitario, ahora van a por la estructura del Estado directamente.
Que si estuviéramos asistiendo a una revolución anarquista y el Estado cae, estupendo. Pero es que lo que viene detrás del ataque a la estructura política del Estado por parte de "los mercados" da mucho miedo: nos quieren como país de mano de obra barata, muy barata, y para eso tienen que meter mano a nuestra legislación, directamente desde los órganos de gobierno.
Recortan sueldos, pagas extras, derechos laborales y sociales, servicios sociales, ayudas médicas y a la vivienda, recortan la sanidad, la educación, suben impuestos y el coste de la vida, bajan los sueldos...
porque hay que inyectar dinero a la banca.
Mientras, la ridícula fiscalidad de las multinacionales españolas, y la permisividad que disfrutan para evadir capitales a paraísos fiscales y demás triquiñuelas, siguen adelante; con una lógica presión fiscal sobre estos HIJOSDEPUTA, nos olvidábamos de los recortes y de que tenemos un futuro de mierda vendido a las élites financieras que dirigen el mundo. Paro, emigración y pensiones yéndose a la mierda. ¡Porque hay que mantener el sistema capitalista, que otra cosa no funciona!
Veo como la gente se calienta y se montan películas con los últimos comunicados de agrupaciones de policías, militares y guardias civiles. Pero que os pensais? Si en España ni Dios ha cuestionado el sistema en casi cuarenta años, ni ha militado en organizaciones, ni se ha formado ni se ha afiliado a sindicatos o partidos combativos, de repente ahora todos somos militantes revolucionarios y anticapitalistas y estamos a las puertas de una revolución? VENGA HOMBRE!
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Voy a hablar de bicicletas, porque cada vez que constato la estupidez del ser humano me salen más canas y duermo muy mal. Además, en Moscú está haciendo mucho calor y humedad, y ya es bastante difícil conciliar el sueño.
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Y la última pieza recuperada. Una Ukraina del año 72. Muy ligera, sobre todo sin guardabarros ni transportín, me bajo de un salto y me la cargo al hombro casi con el mismo movimiento. Esta bicicleta estaba muy cascada, porque pasó por las manos de dos jovenzuelos durante los 70, y le hicieron de todo. En Moscú no existían bmx ni mountain bikes en los 70, así que imaginaos el trato que le dieron durante años a esta bici dos generaciones de adolescentes. Y aún anda como si nada. Tuve que enderezar el manillar, sustituir rodamientos y pedales, tornillería, incluso el sillín, que estaba podrido. Normal, 15 años aparcada en una terraza donde entraba agua. Sigue estando ligeramente deformada, pero rueda como un bólido. Me la voy a dejar para los días sin lluvia. Colgaré fotos serias en breve.
Y cierro hoy el blog insistiendo con una gran verdad: montar en bicicleta, sustituyendo al coche, es revolucionario, hoy por hoy.
